Premiado con el Nobel Albert Camus se acordó de quién guió su camino en los primero pasos de su vida. Su madre y su maestro de primaria, significativo.Es una carta escueta que para los que amamos la profesión lo puede decir todo....9 renglones, 155 palabras capaces de dar sentido a todo.
París, 19 de noviembre de 1957
Querido señor Germain:
Esperé a que se apagara un poco el ruido de todos estos días antes
de hablarle de todo corazón. He recibido un honor demasiado grande, que
no he buscado ni pedido. Pero cuando supe la noticia, pensé primero en
mi madre y después en usted. Sin usted, sin la mano afectuosa que tendió
al niño pobre que era yo, sin su enseñanza no hubiese sucedido nada de
esto. No es que dé demasiada importancia a un honor de este tipo. Pero
ofrece por lo menos la oportunidad de decirle lo que usted ha sido y
sigue siendo para mí, y de corroborarle que sus esfuerzos, su trabajo y
el corazón generoso que usted puso en ello continúan siempre vivos en
uno de sus pequeños escolares, que, pese a los años, no ha dejado de ser
un alumno agradecido. Un abrazo con todas mis fuerzas,
Albert Camus